FUTURO
Nuestro sueño
Desde Amaicha del Valle (Tucumán) hasta La Poma (Salta), pasando por muchos pueblos, parajes o simples caseríos es nuestra área de trabajo. Los habitantes no son simples números para estadísticas, ni sus necesidades simples historias para contar. Desde el 2002 asumimos un compromiso de ayuda espiritual y social, lo estamos cumpliendo y nos estamos esforzando para hacerlo cada vez mejor.
Desde los niños que se entusiasman con las historias, juegos, payasos y películas, hasta los ancianos que al vernos nuevamente por el pago nos expresan su agradecimiento y respeto por cumplir nuestra palabra de regresar, movilizan nuestro esfuerzo de juntar donaciones y motivar a mas estudiantes, profesionales y todo tipo de voluntarios a ir o involucrarse de alguna manera.
Nuestro sueño es contar con un equipo que vaya a vivir a aquellas zonas para atender a las personas contactadas y crear un Centro de Desarrollo Integral, donde podamos prestar asistencia médica de alta complejidad, y contribuir a la formación del liderazgo presente y futuro. Esperamos que esto sea una realidad los próximos años y desde ya estamos trabajando para lograrlo, porque el Proyecto Valles Calchaquíes está en nuestros corazones durante todo el año.
Una oración respondida
Una carga de nuestro corazón desde que empezamos este proyecto fue cómo darle seguimiento a la gran cantidad de gente contactada durante las semanas de julio. Personas que hicieron decisión de seguir a Jesús, personas que recibieron ayuda, cristianos que se movilizaron para colaborar, etc. Tiempo después pudimos ver cómo Dios ya había pensado en esto enviando algunas personas.
Natalia Maldonado
Durante el 2007 y 2008 una joven maestra de Puerto Madryn (Chubut) decidió comprometerse con este proyecto, radicándose en una de esas comunidades. Ella vivió por dos años con la gente de Amaicha del Valle (Tucumán), compartiendo y transfiriendo su vida con niños, adolescentes, madres, maestros y familias. Fruto de ello, hoy un grupo de adolescentes se reúne periódicamente para seguir conociendo a Dios, buscando ayudar a otros como ellos a conocerlo y atender las problemáticas que se viven por esos lugares.
Nicolás Rinaldi
El es un joven estudiante de San Miguel de Tucumán que desde el 2009 viaja cada 15 días para pasar un fin de semana con la gente de Amaicha (especialmente con los jovenes y adolescentes). Tiene un tiempo de estudio bíblico y capacitación con ellos, y también vincula a otras personas de su ciudad para acompañarlo en algunos viajes, y ayudar en diversas necesidades de los chicos y la comunidad.
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